La casa de Gran Hermano se convirtió en escenario de un tenso enfrentamiento entre Furia y Joel, desatando un fuerte conflicto por un simple pedazo de pollo.
En una nueva edición de Gran Hermano 2023, la casa se convirtió en el epicentro de un enfrentamiento entre Furia y Joel, desencadenado por una disputa acalorada por un trozo de pollo. La discusión se tornó intensa, generando tensiones que resonaron en toda la casa.
Todo comenzó cuando Furia, visiblemente molesta, compartió su experiencia de sentirse excluida durante las comidas. «Siempre como última y sola, no como acá en la mesa. Voy a buscar, me habían puesto pollo y Joel viene y me dice ‘tenés mucho, dame que te corto un pedazo'», expresó la participante a Romina Uhrig.
Joel, interrumpiendo la narrativa, defendió su posición argumentando que no había suficiente comida ese día y que cada participante debía servirse dentro de ciertos límites. La tensión escaló rápidamente cuando Furia afirmó indignada que Joel le había quitado el pollo de su plato, revelando así su percepción de la dinámica de la casa.
La disputa tomó un giro más áspero cuando Joel le reprochó a Furia su falta de colaboración y participación en las tareas comunes. Furia, enérgica, respondió acusándolo de envidia y desafiando a quienes la critican. La confrontación concluyó con Furia lanzando una declaración contundente: «Váyanse a la mierda todos».
Este tenso episodio no solo expone las tensiones subyacentes en la convivencia de Gran Hermano 2023, sino que también revela las diferencias de percepción y las disputas latentes entre los participantes, desatando un nuevo capítulo de polémica en la casa más observada del país.
