La extenista argentina sorprendió a todos con un posteo en redes sociales, mientras el escándalo por su ausencia en la boda de su sobrina sigue generando polémica familiar.
La reciente boda de Oriana Sabatini y Paulo Dybala ha sido uno de los eventos más comentados del año, no solo por la unión de dos figuras destacadas sino también por la notable ausencia de Gabriela Sabatini, tía de la novia y una de las deportistas más queridas de Argentina. Este faltazo no solo confirmó los rumores de tensiones familiares, sino que también encendió un escándalo mediático que involucra a su hermano, Ova Sabatini, y su cuñada, Catherine Fulop.
Los rumores de una enemistad entre Gabriela y Catherine Fulop han circulado durante años. La artista venezolana, aunque reservada sobre los detalles, no ha ocultado que nunca tuvo una relación cercana con la extenista. En medio de esta situación, Gabriela Sabatini reapareció en Instagram con un posteo enigmático que no pasó desapercibido para sus seguidores. Sin dar explicaciones directas, su publicación pareció ser una respuesta velada a las especulaciones.
El posteo, que rápidamente se llenó de comentarios, dejó a muchos preguntándose sobre la verdadera naturaleza de las relaciones dentro de la familia Sabatini-Fulop. Mientras tanto, Oriana y Paulo continúan disfrutando de su luna de miel, ajenos al revuelo mediático que su boda ha generado.
La ausencia de Gabriela Sabatini en un evento tan significativo no solo ha levantado sospechas, sino que también ha generado un debate sobre las dinámicas familiares y la presión pública que enfrentan las figuras mediáticas. Aunque la extenista no ha dado declaraciones oficiales sobre su ausencia, su silencio y su sutil posteo han dejado claro que hay mucho más detrás de la aparente discordia.
En un entorno donde las relaciones personales a menudo se exponen al escrutinio público, la situación de los Sabatini refleja las complejidades que cualquier familia puede enfrentar, amplificadas por la fama y la atención mediática. Solo el tiempo dirá si estas heridas familiares podrán sanar o si las diferencias seguirán marcando distancia entre sus miembros.